lunes, 6 de diciembre de 2010

Trabajos de la Academia


Me parece fatal no haber actualizado antes pero últimamente paso más tiempo pensando como capear la crisis que cosiendo asi que hoy toca resumen de lo que voy haciendo en clase. Lo primero que cosí el año pasado fue una falda recta (que yo hice un poco de tubo para hacerla con algo más de rollo).

La tela es una loneta con un estampado GENIAL que me regaló la Tía Vicenta a la que quiero dar las gracias porque no se imagina lo agradecido que estoy a todas las telas que me ha ido dando poco a poco (que son unas cuantas!) y tampoco imagina lo que le odian mis compas de piso al tener que limpiar y ver el espacio que ocupan y lo que pesan! jeje

La modelo es Ade, que consigue también que cualquier cosita luzca mejor. Este año también estamos cosiendo cositas de canastilla, es decir, para bebés recién nacidos y hasta 24 meses (momento en el que se supone se le quitan los pañales y ya hablamos de 2 años para poder diferenciar).

Lo primero que hicimos fue un vestidín de volantes muy cuco y que a mi me gustó mucho porque fue fácil de coser y además me gustó como quedó con las telas que elegí. Unos retales que compré en Ikea y que pensé que nunca utilizaría por ser muy pequeñines. Uno con dibujos de pajaros y otro con dibujos de flores que combinados con unos vivos de color dieron muy buen apaño.



Lo último que he cosido es un vestido con pliegues en el pecho en tela de tapizar, que aunque queda genial, me suele dar problemas para los cierres ya que al ser tan grueso no puedo coserle cremalleras invisibles porque no cierran y toca coserle a mano las normales. Menos mal que Regina tiene más paciencia que yo y entre los dos lo hacemos (a veces más ella que yo).


El pecho queda cubierto por un palabra de honor que tapan los pliegues por si hubiera algún "accidente" y estos cayeran o se movieran del sitio. Y la falda pues tiene unos fuelles para queel evasé quede bien levantado y abultado. De hecho Regina hija me metió prisa por acabarlo para poder colocar el maniquí con el vestido en el escaparate para que se pueda ver desde la calle. Lo cual me llena de orgullo, claro.




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